Terapia Medicamentosa
Los analgésicos, tales como el paracetamol, pueden ayudar al paciente a llevar mejor su día a día, pero generalmente no se debe exceder la dosis diaria recomendada. Un médico de familia, o un especialista de la unidad de dolor, podrán recomendar otros tratamientos analgésicos en caso necesario.
MAINE – Los medicamentos anti-inflamatorios no esteroideos (NSAIDS por sus siglas en inglés)- pueden aliviar ligeras inflamaciones. Como sucede con todos los medicamentos, un paciente puede necesitar probar diversos principios activos antes de encontrar la medicación apropiada a sus necesidades, siempre bajo supervisión médica. A algunos pacientes se les puede recomendar no tomar estos medicamentos si tienen otros problemas médicos. Siempre es recomendable que sea un médico general, que conozca lo más posible el síndrome en su conjunto para que un tratamiento para un síntoma concreto no perjudique a medio o largo plazo otro síntoma.
Otros Tratamientos
Inyecciones/infiltraciones. Algunas veces, se puede lograr un alivio temporal de los síntomas de osteoartritis moderada de rodilla mediante una inyección de cortisona, particularmente si hay inflamación o líquido en la articulación. Esto se recomienda normalmente bajo la indicación expresa de un especialista conjuntamente con otros tratamientos y es posible que no sea adecuado en todos los casos, o que los efectos secundarios no compensen los posibles beneficios. Por ejemplo los corticoides no están indicados en ciertos problemas oculares, que se pueden dar conjuntamente con problemas articulares.
Artroscopia. Algunos pacientes (por ejemplo, los que sufren dolor intermitente y bloqueo de la articulación de la rodilla debido a fragmentos sueltos de cartílago o hueso en la articulación) puede que necesiten una intervención llamada artroscopia para limpia r la rodilla y eliminar todos esos fragmentos sueltos.
Cirugía. Últimamente a aquellas personas que tienen dolor u osteoartritis importante se les puede hacer un cambio de articulación. Las operaciones comunes se hacen en la cadera o en la rodilla.
Los centros de especialistas ortopédicos normalmente se preocuparán por los pacientes más jóvenes, gente con otras complicaciones en las articulaciones o aquellos que necesitan cirugía para corregir serias deformidades de articulaciones.
Complicaciones en las articulaciones
El grado de complicación en las articulaciones dentro del Síndrome de Stickler es variable. Algunas personas pueden experimentar pocas complicaciones, mientras en otras las complicaciones son más significativas y desde una edad más temprana.
Articulaciones flojas o hiperlaxas y articulaciones prominentes (por ejemplo, rodillas, dedos…) son características que se pueden ver en los niños. Más adelante, en la edad adulta, las articulaciones pueden volverse rígidas, pueden aparecer episodios de osteoartritis temprana. La osteoartritis, que es común en una población anciana, puede aparecer, en el Síndrome de Stickler, a una edad muy temprana (por ejemplo, al iniciar la treintena o cuarentena, o incluso en niños y adolescentes, por lo que conviene vigilar como mínimo de manera anual las articulaciones). Los problemas articulares pueden afectar al cuello y la espalda y se les reconoce como espondilosis cervical y lumbar respectivamente.
Los síntomas que afectan a las articulaciones (por ejemplo, dolor, rigidez) se pueden agravar por su uso excesivo, al ser hiperlaxas. Durante la niñez las características pueden imitar (y algunas veces ser confundidas con) otras formas de artritis juvenil, u otras condiciones asociadas con la hiperflexibilidad, tales como el Síndrome Marfan.
Entre otros síntomas, pueden aparecer pies planos, debido a la hiperlaxitud y falta de tono muscular.
Escoliosis
Las posibles alteraciones detectadas en Rayos X y radiografías que afectan a la columna vertebral incluyen la displasia espondilo-metafisiaria que se refiere a irregularidades de los huesos de la espalda (vértebras). Estos cambios pueden ser secundarios y no causar síntomas pero ayudan a la hora de hacer un diagnóstico. Otros cambios de displasia mostrados por los rayos X (irregularidad de la forma de los huesos) se puede ver que afectan a las extremidades del fémur (hueso del muslo) u otros huesos largos.
La hiperflexibilidad, o una movilidad excesiva de ciertas articulaciones, puede provocar que las articulaciones se vuelvan dolorosas y propensas a dislocarse. La rótula, el hombro o incluso la cadera se pueden dislocar, provocando dolor, aunque pueden volver a la posición correcta.
Los niños son también propensos a sufrir dislocaciones articulaciones, y los padres y profesores del colegio deben ser conscientes de este problema potencial cuando un niño está jugando y haciendo ejercicio.
Algunas personas pueden necesitar modificar su estilo de vida para proteger sus articulaciones y prevenir complicaciones, tales como episodios tempranos de osteoartritis, que puede ser el resultado de usar mucho las articulaciones flojas.
Como todas las condiciones degenerativas, ya que el cartílago que cubre la extremidad de los huesos desaparece, dejando frotar hueso con hueso, las articulaciones se vuelven rígidas, dolorosas y difíciles de mover con el paso de los años.
La mayoría de las articulaciones comúnmente afectadas son las caderas, los tobillos, el cuello, la espalda, las manos, pies y articulación temporomandibular (ATM).
Caminar con la articulación de la cadera afectada puede ser difícil y la cadera gradualmente se degenera. Esto puede tener resultados en la pierna de ese lado, convirtiéndose visualmente más corta que la otra.
La osteoartritis en las rodillas también puede provocar una gran cantidad de deformidades. Puede hacer que la rodilla esté nudosa y la persona afectada puede tener las piernas arqueadas o en valgo.
Algunas personas tendrán dificultad al subir y bajar escaleras, y es posible oír crujidos y ruídos rechinando cada vez que la articulación con artritis se mueve.
La articulación más común en los pies que puede ser afectada por osteoartritis es la articulación que está en la base del dedo gordo. Llevar zapatos cómodos puede ayudar a aliviar la presión en la articulación.